Promesa de los Cooperadores Paulinos en Conceição do Tocantins/TO
- Suore Pastorelle
- 1 jul
- 6 Min. de lectura
Un apostolado bien hecho, con espíritu apostólico, es similar a la predicación de Jesús. Somos colaboradores de su apostolado (su misión) en el mundo.
(Beato Tiago Alberione)
En la pequeña localidad de Conceição do Tocantins/TO, el pasado sábado 21 de junio de 2025, durante la Misa votiva por el Beato Padre Tiago Alberione, 12 nuevos miembros fueron admitidos en la Familia Paulina, haciendo la Promesa como Cooperadores Paulinos, en la Parroquia de Nossa Senhora da Conceição, en presencia de la Hermana Suzimara Barbosa de Almeida, sjbp, y del párroco, Padre Rafael Ferreira da Rocha.

Después de completar el período de formación, además del retiro de fortalecimiento y discernimiento, los candidatos formalizaron su solicitud de ingreso a la Asociación de Cooperadores Paulinos: Apoliana Bispo de Souza, Dolores Francisco dos Santos, Domingas Firmino Pereira Rocha, Elismar Batista Ferreira, Elziene Cardoso dos Santos, Fábio Divino Pereira Teles, Joaquina Cursino Guedes (Neném), Maísa Costa dos Santos Guedes, Mirtis Ferreira de Moura, Regilene Carlos Bispo, Plácida Tolentino de Deus, Vilma Francisco Ribeiro. Un grupo diverso, desde profesores hasta personas con menos formación, pero todos llenos de vida y fe, con edades desde los mayores, de 85 años, hasta los más jóvenes, de 27.
Entre los 12 nuevos miembros, un candidato fue seguido a distancia. Hija de esta tierra, se mudó a Goiânia, pero su pasión por la Familia Paulina mantuvo vivo su deseo de ser Cooperadora Paulina. Otra, con síndrome de Down, ha participado regularmente en las reuniones desde 2007, junto a su abuela de 81 años. Ahora, a los 33 años, junto con su familia, ha asumido públicamente la misión de ser Cooperadora Paulina, recibiendo un cálido aplauso de la comunidad presente. Otras dos comenzaron el camino en 2004, cuando el grupo apenas comenzaba, dieron sus primeros pasos y, tras un largo tiempo, pudieron retomarlo; las demás se unieron entre 2017 y 2020, siguiendo el camino presencial y a distancia. Lo hermoso es ver la gracia de Dios obrar en la vida de cada persona con la espiritualidad y el color paulinas. Según los Estatutos de esta Asociación, Artículo 12, §1: «Para el Cooperador Paulino, el significado y objetivo de la Promesa es expresar el deseo de vivir la propia vocación bautismal según el carisma paulino, comprometiéndose en el mundo a dar testimonio, con su vida y palabra, del Evangelio que él proclama».
La Hermana Suzimara presentó a los candidatos a la comunidad: «Estos Cooperadores laicos, habiendo sentido en sus corazones el mismo carisma del Beato Alberione, a través de las Hermanas Pastorinhas que vivían en Conceição, desean añadir a su vocación laical la promesa de ser signo de la Familia Paulina en la Iglesia, comunicando a Jesús en persona a las personas, como lo hizo Jesús, el Buen Pastor». Tras hacer la Promesa, el sacerdote exhortó al grupo a permanecer en la gracia recibida, recordándoles que esta gracia no hace a nadie más grande ni mejor que los demás hermanos que no son Cooperadores, sino que convierte a cada Cooperador en un servidor del Proyecto de Jesús. Vivir mejor la gracia del estado, estando en gracia. En la Santa Misa, todos los Cooperadores renovaron su Promesa. Cabe mencionar que, aunque son un grupo lejos de la sede en Caxias, se han mantenido firmes sin la presencia física de las Pastorcitas desde mediados de 2018. Reciben apoyo en línea y un Retiro Anual, donde la presencia de una Pastorcita, cada año, conmueve no solo a los Cooperadores, sino a toda la ciudad, que acoge así a todos aquellos que han marcado la historia de un pueblo.
Cooperadores Paulinos de Conceição do Tocantins/TO
Testimonios:
“¡Qué alegría es cumplir la Promesa! Empecé este camino en 2004/2008, y después de unos años dejé de asistir a las reuniones, así que en 2014 no hice la promesa con el primer grupo. Regresé a las reuniones en 2015, y ahora, a mis 85 años, tengo la gracia de recibir oficialmente el nombre de Cooperadora y ya no soy candidata.”
(Joaquina Cursino Guedes – Conceição do Tocantins)
“¡Gracia y paz, hermanos! Hoy quiero compartir algo que ha transformado mi vida: el proceso de formación de Cristo en mí. Fue en medio de las dificultades que comencé a comprender lo que el apóstol Pablo quiso decir en Gálatas 4:19, cuando escribe: “Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto hasta que Cristo sea formado en ustedes.” Esta formación no se da de la noche a la mañana. Es un proceso doloroso, continuo, pero glorioso. Desde que comencé mi formación como Cooperadora Paulina, comprendí que Cristo comenzó y continúa formándose en mí; comencé a morir a mí misma, a mi orgullo, a mis deseos egoístas, a mi deseo de tener siempre el control. Y que cada vez que me derrumbaba ante Él, sentía más su presencia llenándome. Hoy no soy perfecta; todavía estoy en construcción. Pero puedo dar testimonio de que Cristo me ha moldeado con sus manos. Ha transformado mi corazón, mi mente, mis actitudes. Lo que antes era solo religión ahora es una relación. Lo que antes era apariencia ahora es verdad. La experiencia de la promesa es un momento único; solo quienes la viven la entenderán y comprenderán. Mi oración diaria es: «Señor, continúa tu obra en mí, hasta que Cristo esté plenamente formado en mí». Ven y sígueme. Durante estos años de preparación para la profesión, sentí con fuerza la llamada de Cristo Pastor: ven y sígueme. Siempre me preguntaba: ¿por qué yo? Y poco a poco, comencé a comprender que proclamar a Jesús en los entornos en los que me encuentro es una misión/llamado. Me comprometí a seguir evangelizando. Esta es mi llamada, esta es mi vocación. Durante el retiro, pude confirmar aún más esta llamada. Aquí estoy, Señor, haz de mi vida un instrumento de tu evangelización. Ser Cooperador Paulino es cooperar en la misión. Jesucristo, ayúdame a ser fiel. San Pablo, apóstol, y el beato Santiago Alberione, intercedan por cada uno de nosotros y ayúdennos a ser fieles como la Santísima Virgen María.
(Maísa Costa dos Santos Guedes – Goiânia/GO)
“Que el Divino Espíritu Santo me ilumine con esta bendición de ser Cooperador Paulino, aumentando mi fe. ¡Qué bien siento que Dios me cuida! ¡Gracias, Señor!”
(Domingas Firmino Pereira Rocha – Conceição do Tocantins)
“Nuestra reunión fue muy buena; solo estoy agradecida a Dios por esta hermosa labor de los Cooperadores. He leído poco, pero cada momento es un gran aprendizaje. No debemos tener miedo, sino tener fe.”
(Mirtis Ferreira de Moura – Conceição do Tocantins)
“Esta reunión y la misa renovaron mi fe. Gracias, Jesús, el Buen Pastor, por llamarme a ser Cooperadora Paulina.”
(Plácida Tolentino de Deus – Conceição do Tocantins)
“Se lo debo todo a Dios, a la Hermana Flora, que me invitó varias veces, y a ustedes, del equipo de coordinación, que nunca renunciaron a creer que sería cooperadora.” Ya veremos si estoy dispuesta... ya se ha dado un paso... Me conmovió mucho recordar cómo mi querida abuela Chica daba un hermoso grito allí... Y cuando hablaron en el altar sobre la "Telaiada", confirmando una vez más muchas cosas... Me maravilló ver a nuestra familia Teles representada allí en el altar con generaciones de tía Amélia, tía Quinucha, tía Neta, prima Darlene y otras sobrinas y nietas sirviendo al Señor Jesús. Participar en el retiro fue genial, los momentos en grupo, el compartir, algo realmente maravilloso, Jesús el Maestro respondiendo con palabras y ejemplos de comprensión hacia los demás. Fue maravilloso sentir la reconfortante presencia del Espíritu Santo en el ambiente natural... No sería un buen retiro si faltara alguien que Jesús no quería que estuviera con nosotros... Quienes estuvieron allí alegraron nuestros corazones y almas... Quienes faltaron intensificaron nuestras oraciones por ellos... Gracias a la Hermana, a todos los de la organización y a las chicas de la comida... todo fue perfecto como Dios lo quiso...
(Fábio Divino Pereira Teles – Conceição do Tocantins)
¡Lo extraño tanto y siento que quiero más! Estos días de retiro fueron una verdadera bendición: una renovación de fuerza, gracia y paz. El primer día, al escuchar la canción "La mano del Señor está sobre mí", sentí una paz inmensa en mi corazón. Fue como si Dios me tomara en sus brazos y me dijera con todo su amor: "No importa lo que estés pasando, estoy aquí contigo". Sentí que era allí, en este lugar, en este grupo, donde debía estar. Él aclaró mis dudas. Fue un momento profundo que me conmovió profundamente; casi lloré, pero me contuve un poco... El segundo día, cada momento fue maravilloso, pero algo especial sucedió cuando salimos a orar solos y empezó a sonar la canción "Que entre la luz del cielo". Sentí que Jesús me renovaba, diciéndome: "No tengas miedo de seguirme, sigue mis pasos". En el ajetreo de la vida diaria, a menudo nos sentimos débiles y cansados, pero el Espíritu Santo viene y nos fortalece. Nos muestra que Dios es fiel, que siempre está con nosotros, pase lo que pase. ¡Y yo soy prueba de ello! Cada día, en mi vida, en mi familia, en todo... veo el cuidado y el amor de Dios. Hacer la Promesa superó mis expectativas. Sentí una gran responsabilidad y la necesidad de dar más de mí. Mi corazón estaba feliz y me preguntaba qué sucederá de ahora en adelante. ¿Seré capaz de responder? Y le pedí a Dios que me diera sabiduría, discernimiento, temor y que aumentara mi fe constantemente. Me invitaron a unirme al equipo de coordinación local hace más de dos años y estoy aprendiendo un poco cada día. ¡Por eso doy gracias al Señor en todo!
(Apoliana de Souza Bispo – Conceição do Tocantins)
Comments