En Filipinas, los miembros de la Familia Paulina se turnan para organizar la celebración de la fiesta de nuestro fundador, el beato Santiago Alberione. Este año, nosotras, las Hermanas de Jesús Buen Pastor “Pastorelle”, organizamos el “Encuentro de la Familia Paulina”, que se celebró en la Escuela Jesús Buen Pastor en la ciudad de Imus, Cavite, el 23 de noviembre. El tema del encuentro fue: “Sa yapak ni Alberione, may Pagkakaisa na puno ng Pag-asa”. El evento estuvo lleno de alegría, entusiasmo, amistad, amor y esperanza, gracias a la presencia de nuestros hermanos y hermanas. Asistieron nuestros sacerdotes, hermanos y seminaristas SSP; nuestras hermanas y formandos FSP y PDDM; hermanas Pastorcitas; el Instituto de la Sagrada Familia; el Instituto de San Gabriel Arcángel; el Instituto de Nuestra Señora de la Anunciación; y la Asociación de Cooperadores Paulinos.
Comenzamos el encuentro celebrando la Sagrada Eucaristía como una sola familia. En su introducción, la Hna. Puri destacó que el Beato Santiago Alberione fue un hombre de su tiempo, atento al Espíritu y profundamente dedicado a la Iglesia. La celebración eucarística fue presidida por el P. Celso Godilano, SSP – Vicario Provincial, con el P. Edward Dantis, SSP, como homilista, junto con otros sacerdotes paulinos concelebrantes. En su homilía, el P. Edward compartió que Jesús camina con nosotros y nos llevará al cielo. Mientras estemos todavía en la tierra, siempre hay esperanza. Sin embargo, cada uno debe encontrar su camino y responder a esta oferta. Él nunca nos abandona, y es a través del sufrimiento y la muerte de Cristo que nosotros, como cristianos, debemos caminar para encontrar la unión con el Padre. Nuestra lectura del evangelio nos recuerda que nuestra fe trae esperanza a nuestras vidas, y Jesús nos asegura que Él ha preparado un lugar para nosotros.
Después de la celebración eucarística, disfrutamos de una comida juntos, seguida de un breve programa. El programa incluyó una procesión de la imagen de la Santísima Madre en Karakol, acompañada por una foto del Beato Santiago Alberione, mientras era llevada al gimnasio. Cada congregación e instituto preparó una presentación especial, y hubo preguntas de trivia sobre la vida de nuestro Fundador, seguidas de juegos de los que disfrutaron todos los miembros de la familia paulina, tanto jóvenes como mayores. Durante el programa, tuvimos el honor de recibir la visita del amado Obispo de Imus, Mons. Reynaldo Evangelista, quien dio la bienvenida a toda la Familia Paulina y expresó su gratitud por la presencia de varias congregaciones paulinas en la Diócesis.
Terminamos el día con el corazón lleno de gratitud, alabando a Dios por el don de nuestro amado Fundador, el Beato Santiago Alberione, a la Iglesia. Verdaderamente, somos hijos del Beato Santiago Alberione: un hombre de oración, de humildad y de silencio; un hombre que sabe escuchar con un corazón lleno de amor.
Hna. Sheila Mae M. Estremos, sjbp
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